Es esa época del año otra vez, llena de deliciosos platos, dulces y bebidas, y comidas para disfrutar dentro o fuera con tus colegas, amigos y familia. Y no puedes evitar preocuparte por el impacto que todo esto tendrá en tu cintura. La verdad es que la Navidad debe ser una época para relajarse y disfrutar sin sentirse culpable o ansiosa por tu peso o tu dieta.
Sin embargo, tampoco significa que no tengas más remedio que tirar la casa por la ventana sólo para lamentarlo cuando se acabe la Navidad y hagas tus propósitos de Año Nuevo. Puedes encontrar el equilibrio entre el exceso de indulgencia y la ansiedad. Así que aquí tienes algunos consejos prácticos y útiles para evitar los atracones en Navidad y seguir disfrutando como es debido.
1 - Planifícalo
Es muy fácil perder la cuenta de lo que se come, especialmente cuando tienes eventos que atender. Lo primero que debes hacer es decidir que comidas vas a hacer especiales a la vez que mantienes tu plan de dieta en cualquier otro momento. Si te das el gusto en la fiesta de la oficina, en la cena de Navidad y en la de Nochevieja, esas son 3 comidas en un período de 3 semanas, lo que difícilmente va a arruinar el esfuerzo de meses que has invertido en tu alimentación.
Después de todo, socializar, incluso alrededor de una mesa llena de comida, se trata de conectar con la gente, compartir historias, divertirse y crear recuerdos.
2 - Quémalo
Admitámoslo, las vacaciones nos hacen perezosas y parecen ser el momento perfecto para relajarse y hacer el maratón telesofá pero, en realidad, ¡podría ser el mejor momento para hacer ejercicio! Con una pausa en el trabajo, tienes más tiempo para ti misma y los gimnasios están menos llenos.
Así que una buena manera de minimizar el impacto de ese pastel es unirse a una clase de fitness que realmente te guste. Piensa diversión y variedad, tal vez Zumba un día, spinning otro día y yoga otro. ¡Las clases grupales son un gran motivador!
Por supuesto, puede que prefieras estar al aire libre, así que podrías comprometerte a una caminata rápida de 30 min o una carrera de 15 min diaria o cada dos días y hacer ese tiempo "para mí" no negociable.
Al hacer ejercicio mantienes tus endorfinas fluyendo, lo que te ayuda a hacer elecciones más saludables.
3 - Socializa con Inteligencia
Cuando comes fuera, lo más probable es que tomes malas decisiones en lo que respecta a la comida. Si bien es importante socializar, es mucho más importante estar saludable. ¿Y si te dijera que puedes hacer ambas cosas al mismo tiempo? Veamos cómo hacerlo:
Conoce el menú. Siempre que salgas, mira el menú en la web de antemano para saber qué opciones saludables tienen y así saber qué es lo que vas a pedir. Y no tengas reparos en pedir un intercambio saludable, estarán encantados de intercambiarte las patatas fritas por la ensalada o las verduras.
Come un tentempié sano de antemano. Come una manzana o un plátano con unas pocas almendras o un yogur con algunas nueces antes de salir, para no saquear cualquier comida que se te ponga delante porque tienes el estómago vacío.
Elige agua. Bebe agua antes y durante la comida. No tiene sentido desperdiciar calorías en bebidas porque no te dan una sensación de saciedad. Así que continúa con la botella o jarra de agua mientras esperas tu comida.
Pide tu comida primero. Las preferencias de los demás pueden influir en las tuyas, así que sé la primera en pedir la comida para que hagas tus propias elecciones en lugar de seguir la tendencia de nadie.
Elige café en vez de postre. Si te resulta demasiado difícil, comparte tu postre con otra persona o simplemente cómete la mitad para sacarte el gusanillo del cuerpo.
4 - Vigila tu consumo de alcohol
El consumo de alcohol durante las fiestas puede ser un poco más tentador, pero el alcohol puede causar un aumento de peso simplemente porque contiene muchas calorías sin valor nutricional.
Tómatelo con calma, elige bebidas que se sirvan con agua mineral o con gas o con combinados bajos en calorías. Y bebe agua entre una y otra , te mantendrá hidratada y te ayudará a reducir el consumo. El alcohol hace que pierdas el autocontrol y pienses que todavía tienes espacio para ese último trozo de tarta de Navidad.
5 - Come con atención
La alimentación consciente puede ser beneficiosa a muchos niveles. Comer despacio le da tiempo a tu estómago para darse cuenta de cuánto estás comiendo y te ayudará a evitar comer en exceso. Tómate tiempo degustando tu comida, te ayudará a darte cuenta de lo grasienta o azucarada que está y te permitirá dejar de comer cuando tus papilas gustativas se saturen.
Puede que disfrutes cocinando durante las fiestas, en ese caso, busca alternativas o métodos de preparación saludables, sabiendo que lo que pones en tu plato es sano y nutritivo.
Si quieres descubrir qué tipo de comensal eres,
haz mi Type of Eater Quiz (en inglés)
y recibe consejos en base a tus resultados.
La Navidad es definitivamente una época de alegría, y deberías disfrutarla, manteniendo tus hábitos saludables la mayor parte del tiempo. Con estos sencillos trucos, ¡puedes mantenerte sana y disfrutar al máximo de las fiestas!